lunes, 23 de junio de 2014

Onigiris o bolitas de arroz rellenos a la plancha. (O no)

Onigiris, o bolitas de arroz, de origen japonés. Las hay de mil formas con distintos rellenos, ingredientes, formas, decoraciones, etc. Fáciles y cómodos de transportar y comer en cualquier sitio fuera de casa. ¿Por qué llevar un simple bocadillo como los demás cuando puedes ser mejor que nadie y llevar onigiris?

Primero, voy a enseñaros cómo cocer el arroz. El arroz hay que cocerlo al vapor. Si tienes una arrocera o thermomix preparadas para esto, eres una persona afortunada. Para las que no, (incluyéndome) os voy a enseñar cómo cocerlo igualmente.

Venden en los supermercados orientales arroz 'especial para sushi', que sería el más indicado, pero puedes hacerlo con arroz blanco normal, de grano corto.
La proporción de agua y de arroz es de por cada medida de arroz, una medida y media de agua. Entonces, si usamos un vaso de arroz, será un vaso y medio de agua. 2 vasos de arroz, 3 vasos de agua, etc.
Así que, ingredientes: (para 6 onigiris)
El arroz:
-1 taza de arroz. (unos 200 g., pero es mejor medirlo según su volumen)
-1 taza y media de agua. (unos 375 ml.)
El Relleno: (lo siento, pero no tengo cantidades ni proporciones)
Atún fresco.
Cebolla.
Pimiento verde.
Jengibre en polvo.
Salsa de Soja.
Sal.

Vamos a empezar con el relleno. Trocea el atún, pimiento, y cebolla en trozos pequeños, y ponlo a marinar junto con la salsa de soja, la sal y el jengibre.


Mientras marina, vamos cociendo el arroz. Primero, lava el arroz con agua muy fría. Frota los granos suavemente para que suelten el almidón, hasta que el agua esté muy blanca. Entonces, escúrrelos, y repite el proceso con agua limpia, hasta que el agua salga bastante clara (no esperes que salga clara del todo, pero puede tomar unas 7 u 8 veces)
Entonces, escurrimos el arroz, lo introducimos en una olla con el agua medida, y dejamos reposar 30 minutos, tras los cuales el nivel de agua habrá descendido y los granos se habrán inflado y tendrán un color blanco más opaco. (Tampoco se nota tanto la diferencia en la foto, pero hay más de la que parece)


Pasados los 30 minutos, cubrimos con papel de film intentando que se agarre a los bordes lo mejor posible, para ayudar a retener el vapor, y lo ponemos al máximo.
 Cuando rompa a hervir, le pones la tapadera, y puedes ponerle algo de peso encima, en el caso de que tu tapadera no sea muy pesada. Inmediatamente, lo ponemos a fuego bajo, y dejamos cocer unos 10-15 minutos. SIN LEVANTAR LA TAPADERA. Recuerda que estamos cociendo al vapor, no debemos dejar que se escape, y no es necesario removerlo.

Pasado ese tiempo, apaga el fuego, y deja reposar otros 15 minutos. Entonces, y no antes, podrás quitar la tapadera y el papel de film. Remuévelo un poco con una espátula, y podrás comprobar que queda un arroz mucho más pegajoso. De otra forma, las bolas se desmoronarían.


Una vez cocido el arroz, saca el relleno y saltéalo en una sartén con aceite.

Es mejor escurrir el líquido que pueda sobrar en el relleno. Ahora, vamos a montar las bolitas:
Primero, prepara un bol con agua y un poco de sal, y procura tener las manos siempre húmedas, para que el arroz no se te pegue y puedas manejarlo bien.
Coges un puñado de arroz, lo aplanas en una mano y haces un hueco con los dedos.
 Con la otra mano, pones un poco del relleno, y lo aprietas un poco. (Siento que se vea mal la foto)
 Entonces, con el arroz de los bordes lo cierras, asegurándote de que no sale el relleno por ningún sitio.
 Una vez bien sellado el arroz, simplemente aprietas la bola y le das la forma que quieras.
Y así me quedó:
 Es difícil hacer fotos de cómo darles forma, así que os pongo esta que encontré por internet, que, además, muestra tres formas distintas:

Bueno ya tenemos nuestros onigiris. Puedes dejarlos así, envolverlos en alga nori, o, ¡hacerlos a la plancha!

Para eso, pintamos con una brocha una cara del onigiri con salsa de soja.
 En una sartén, calentamos un chorrito de aceite, y los ponemos del lado de la salsa de soja.
 Mientras, pintamos la otra cara de la misma forma, con más salsa de soja.
 Le damos la vuelta cuando esté bien crujiente, ¡y listo!

A mí, personalmente, me gustan más así, por el crujiente que le añade, pero si no vas a comerlos inmediatamente, es mejor dejarlos sin tostar, ya que el crujiente se ablanda, y queda aceitoso por la superficie cuando se enfrían.
Y ya está. Por supuesto, puedes ponerles el relleno que quieras, sólo que deberían tener sabores más bien fuertes, ya que el arroz no tiene ni sal, aunque también puedes echarle diferentes ingredientes al arroz, no todos los onigiris tienen relleno, de hecho. Las semillas de sésamos negro tostado le van muy bien al arroz, por ejemplo.